Datos personales

sábado, 18 de mayo de 2013

''LLORAR OR NOT LLORAR''

¿Llorar o no llorar?
Me siento y pienso. Pienso en que por fin he sido capaz de conseguir algo que quería. Nunca antes había conseguido lo que me proponía, y mucho menos si se trataba de amor. Supongo que siempre hay una primera vez para todo. Hasta aquí todo muy bonito y perfecto. He conseguido besar al chico que desde hace casi dos años me gusta. Al principio lo veía como un conocido, como alguien del que jamás tendría una conversación productiva. Pensaba que mi vergüenza y timidez no me dejarían avanzar para, ni si quiera, conocerle un poquito más. Suponía y daba por hecho que él ni sabría mi nombre, hasta que un día, la que era mi amiga, habló con él. No penséis mal, que no le dijo nada de mi, simplemente estaban hablando de otras cosas hasta que él, dijo mi nombre. Cuando me lo contó aquella chica, yo no daba crédito. Sí, soy un poco tonta.
Al cabo del tiempo empezamos a hablar, pero vamos como si nada. Yo para él era una compañera o conocida, no creo que llegara a amiga. Lo que él no sabía es que para mí, él era más que eso.
Lo malo y lo que jamás esperaba es que se fijara en mi. Y no miento, y estoy en lo cierto.
A medida que pasaba el tiempo ya lo daba por perdido, simplemente le empecé a tratar como un amigo. Supongo que conseguí engañar a mi cabeza, pero no a mi corazón. Yo decía que no, que no me gustaba, me lo decía a mi misma. Conocía a otros chicos y todo iba genial, aunque mi sangre latía su nombre.
En fin, supongo que es una historia normal, común. Le pasará a mucha gente, el problema es que la historia no termina aquí.
Hace muy poco, estábamos de fiesta y cuando le vi bailando con una chica me dí cuenta de lo que llevaba mucho tiempo intentando decirme mi corazón.
Me dije a mi misma: ''Marta, es tu única oportunidad'', y ¡en qué hora me dije eso!, supongo que fueron los efectos del alcohol. Al cabo de un rato, sentí su lengua en mi boca, y comprendí que nunca es tarde para intentar lo que de verdad uno quiere. En fin... eso es de lo poquito que me acuerdo. No sé ni cuánto duró, ni cómo pasó, pero estaba segura de una cosa; sus labios habían tocado los míos.
Después de tanto tiempo lo había conseguido, tenía en mi corazón una victoria.
Y pensaréis a qué viene lo de llorar o no llorar. Muy bien, lo explicaré. Al rato entendí que él jamás quiso que pasara. Que el y yo... bueno, pues eso. Lo sé, soy una pringada en toda regla. Había quien me decía que lo diría en broma, pero no. Yo sé que él, que alguien como él, nunca se fijaría en mí. Supongo que el amor es cosa de dos. El alcohol no sólo sirve para conseguir lo que te propones, también para darte cuenta de que no te quieren.
No sé si llorar, precipitarme y llorar. O tal vez debería sonreír, por haber conseguido besar al chico que desde hace tanto tiempo deseaba. No sé qué pensar, ni cómo reaccionar. Pero sé que nunca olvidaré la sensación que tuve y lo que sentí cuando mi lengua y la suya se juntaron durante unas milésimas de segundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario